Reflexión 7 de Septiembre

Buenos días.
Como ya hemos hecho en otras ocasiones, bueno es que sigamos meditando de los textos litúrgicos como pueden ser los himnos de las Horas.
Hoy os traigo este Himno de la Hora de Laudes.
“En esta luz del nuevo día que me concedes, oh Señor, dame mi parte de alegría y haz que consiga ser mejor.
Dichoso yo, si al fin del día un odio menos llevo en mí, si una luz más mis pasos guía y si un error más yo extinguí.
Que cada tumbo en el sendero me vaya haciendo conocer cada pedrusco traicionero que mi ojo ruin no supo ver.
Que ame a los seres este día, que a todo trance ame la luz, que ame mi gozo y mi agonía, que ame el amor y ame la cruz. Amén”.
Es una oración de súplica con mucho contenido de lo que en la vida nos encontramos cada día, por ejemplo la segunda estrofa: ‘Dichoso yo, si al fin del día un odio menos llevo en mí…’
Ánimo en esta víspera de la Fiesta de la Natividad de Nuestra Señora la Bienaventurada Virgen María, para la que podemos ir preparando un buen homenaje, aunque sea particularmente si no podemos participar de ninguna Celebración comunitaria.
A Ella dirige tu oración en este compromiso de cada de día de rezar por todas las intenciones y necesidades de los Hermanos, que aquí nos encontramos en torno a María, nuestra Madre y nuestra Guía. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
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