Reflexión 25 de Enero

Buenos días en la FIESTA DE LA CONVERSIÓN DE SAN PABLO.
En la vida suele pasar que cuando una cosa o idea se ha repetido muchas veces, parece como que ya está muy vista, muy sabida y no se le da toda la importancia que tiene en sí misma.
Es lo que le ocurre a los cristianos con este gran acontecimiento, que lo fue, de la CONVERSIÓN DE SAN PABLO, pero que cada vez que te acercas a él encuentras LUZ y verdaderas ganas de experimentar la CONVERSIÓN en la propia vida.
Lo primero que conviene tener en cuenta es que las cosas, ni son tan imposibles de vivir, ni tan fáciles de experimentar. Todo necesita un camino a recorrer con su esfuerzo, sacrificio y lo que sea menester agregar.
Eso sí, en el AMOR DE DIOS y con su Gracia TODO ES POSIBLE.
La CONVERSIÓN de vida, todas las personas la necesitamos en mayor o menor medida, pues a lo largo de esta jornada terrenal siempre quedará algo por transformar, por cambiar, por ponerlo acorde con el Corazón de Dios.
La llamada a la CONVERSIÓN es común a todos los creyentes, en razón de que la persona llega a este mundo con el 'pecado original', y aunque sea borrado por el Bautismo, siempre prevalece la inclinación natural al pecado, a lo imperfecto, que pone a la persona en jaque continuo para intentar que transgreda los Mandamientos y quede pillado por el pecado.
De aquí surge lo que se llama el COMBATE ESPIRITUAL, que consistirá en mantener la lucha del bien contra el mal y viceversa, combate que se libra en el propio corazón de la persona, y en el que ésta deberá tomar decisión hacia dónde inclina su voluntad.
Pues bien, la CONVERSIÓN vendrá a ser el trabajo personal que irá logrando que todo lo que determina la propia realidad, se vaya transformando según como nos lo ha revelado nuestro Padre Dios a lo largo de la Historia de la Salvación y de forma definitiva y particular en su HIJO JESUCRISTO.
Veamos pues lo que podría ser el camino a seguir.
La persona tiene que CONOCERSE, para poder tener plena y clara conciencia de quién es y de cómo es.
Igualmente tendrá que ir CONOCIENDO a Dios y las Verdades de la FE.
A partir de aquí todo su esfuerzo será ir consiguiendo que todo su ser actúe, sienta y piense, al estilo de Dios, al estilo de su Divino Corazón, que ha conocido y va conociendo en su íntima relación con Dios: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
La CONVERSIÓN DE VIDA es la tarea más importante, y con mucho, que tenemos todos en general y cada uno en particular.
Y en tanto esta CONVERSIÓN lleve a la persona a caminar por los alegres y generosos caminos de la perfección cristiana, de la santidad, mejor será su ENTREGA en el estado de vida que tenga, y más engrandecida será su persona siguiendo e imitando a Cristo su Señor, que 'pasó por la vida haciendo el bien'.
Si nos decidimos a tomar esta senda de la CONVERSIÓN con ánimo y perseverancia, acojámonos a María, nuestra Madre y nuestra Guía, que Ella nos ayudará y enseñará los mejores caminos a recorrer.
A Ella, Madre de Misericordia, te pido le reces hoy por todas las necesidades de los Hermanos. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI 
Madrid - España 
www.materchristi.es