Reflexión 26 de Noviembre

Buenos días.
Bien sabemos que es a través de la Sagrada Liturgia como la Iglesia Celebra los Misterios de nuestra Fe, ofreciendo a sus fieles el que podamos participar de todas las Gracias que el Señor ha depositado en Ella, para edificación y salvación de todos los bautizados.
También el mundo se beneficia de los Méritos de Nuestro Señor Jesucristo, en la medida que sigue los dictados de una conciencia recta que ilumina la vida honesta y honrada.
El ciclo litúrgico del año actual acaba sus días el sábado 28 al mediodía, ya que la tarde será ya las primeras Vísperas del Primer Domingo de Adviento, con el que comenzará el nuevo año litúrgico, por lo que os propongo que en estos dos días escasos que median hagamos un examen de cómo hemos vivido este año, cómo hemos participado y celebrado la Sagrada Liturgia y cómo hemos tenido al Señor Jesucristo en el Centro de nuestra vida, o por el contrario, ha estado dado de lado alguna vez e incluso excluido por el pecado grave, llamado comúnmente ‘pecado mortal’.
Siempre, cuando se ha de comenzar algo nuevo, conviene no tener que arrastrar nada de lo ya viejo y caduco, por eso es muy conveniente preparar un buen examen de conciencia, reconocer los errores, pedir perdón y, en la medida en que fuera necesario, acudir a la Confesión que es donde está el ‘trono de la Misericordia del Señor’, tal como se lo reveló el Señor Jesús a Santa Faustina Kowalska.
Es muy necesario acostumbrarse a revisar con frecuencia, a poder ser diariamente y a través de la conciencia, la propia vida, pues de esta forma es mucho más fácil mantener el ‘bien hacer’ a imitación del Señor Jesús, “…que pasó por la vida haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo” (Hch 10,38), y así también será más fácil reconocer los errores y rectificarlos de inmediato.
Y ya como cada día, te pido reces con Fe y Esperanza al Señor Jesús en su presencia en la Sagrada Eucaristía, que al ser jueves, día de la semana dedicado a darle culto de Adoración de forma singular, escuchará tu oración por las intenciones y necesidades de todos los Hermanos. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
www.materchristi.es