Reflexión 29 de Noviembre

Buenos días 
Primer día de la Novena de la Inmaculada.
Sería interesante que hoy CONTEMPLEMOS el Misterio de la CONCEPCIÓN INMACULADA de la Virgen María.
Es cierto que la brevedad de este encuentro diario no nos propicia una profundización suficiente, pero al menos sí podremos aproximarnos a tan gran prodigio de la PROVIDENCIA DE DIOS.
Hemos de considerar dos aspectos:
- El designio de Dios, y
- La libertad de la criatura, esto es, de la Virgen María.
En el designio providente e inescrutable de Dios, encontramos que el Señor escoge a María de Nazaret para ser la Madre de la 'Palabra hecha carne'.
Y en atención a los méritos del Señor Jesucristo, Salvador del género humano, María es preservada de toda mancha de la culpa original en el primer instante de su concepción.
Pero, aún tomada por Dios esta decisión insondable, cierta y definitiva, María Virgen, como criatura humana, dotada del don precioso de la LIBERTAD, ha de aceptar y consentir libremente los deseos del Dios Altísimo.
Y así, el Padre Dios envía al Arcángel Gabriel a presentar a María los designios divinos y obtener su consentimiento.
Nos cuenta San Lucas en su Evangelio, cap. 1,26ss, cómo fue:
"Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María.
Y entrando, le dijo: Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo. Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin. María respondió al ángel: ¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón? El ángel le respondió: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios.
Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, porque ninguna cosa es imposible para Dios. Dijo María: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra. Y el ángel dejándola se fue." 
Creo que REFLEXIONANDO estos breves apuntes, podemos entrar con la LUZ del ESPÍRITU SANTO en el grandioso MISTERIO DE LA CONCEPCIÓN INMACULADA DE MARÍA, para Contemplarlo, Amarlo y sentir y alabar toda la grandiosidad de la GLORIA DE DIOS.
Como cada día, con FE Y ESPERANZA, recemos por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI
Madrid - España
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