Reflexión 8 de Febrero

Buenos días
"Amarás a tu prójimo como a ti mismo" (Mc 12,21).
Con el deseo de profundizar un poco más y ayudar a comprender mejor este Consejo Evangélico, pongamos otro ejemplo.
Amarse a sí mismo conlleva RESPETARSE a sí mismo, lo que posibilitará el RESPETAR al otro.
Dicho de otra forma, no podré RESPETAR a la otra persona si no me respeto a mí. O sea, en la medida que uno se respete a sí mismo, será la medida con que respetará al prójimo.
Y ¿qué supone respetarse a sí mismo?
Creo que la respuesta es bien sencilla, tener muy en cuenta lo que es la persona: Imagen y semejanza de Dios, por tanto, supone tener acatamiento al AMOR DE DIOS y a su SANTA LEY.
Lo cual nos lleva a tener consideración de lo que Dios ha dado al hombre, en cuanto a su dignidad, así como todos los valores que ha impreso en la conciencia con la que le ha dotado.
También el Señor Dios, a través de la LIBERTAD dada al hombre, ha puesto en su mano el dominio y la administración de todos los bienes, comenzando por la propia naturaleza humana que ha de cuidar, salud, etc., así como el resto de todas las cosas que dependen de la actitud que se tenga frente a ellas, de RESPETO o de uso egoísta e interesado.
Como puedes ver el Consejo del Señor, más bien, Mandamiento del Señor, es más serio de lo que queremos entender, por lo que bien merece la pena emplear un poco de tiempo a ESCRUTAR para saber cuánto y cómo SE AMA cada cual a SÍ MISMO.
Hoy sábado, te pido reces a la Santísima Virgen por todas las intenciones y necesidades de los Hermanos; hazlo con Fe y con Confianza para que cada uno reciba el beneficio de tu oración. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI 
Madrid - España 
www.materchristi.es