Reflexión 3 de Febrero

Buenos días
¿Dónde encuentro la FELICIDAD?
Buena pregunta: búscala, se le puede responder.
Pero la clave está en buscarla donde esté la VERDADERA FELICIDAD, porque el mundo suele ofrecer fórmulas que más pronto que tarde resultan fallidas.
Si quieres buscar y ser FELIZ, tendrás que mirar antes que nada en ti mismo, porque en ti mismo está la fuente de la FELICIDAD más inmediata y real de la persona.
Cuando se ACEPTA y se ASUME la propia historia, ya se comienzan los primeros pasos hacia la FELICIDAD.
A veces la historia personal ha tenido capítulos o episodios duros, tristes y..., ¡qué sé yo!, pero siempre son parte de la persona y sea lo que haya sido o es, hay que aceptarlo con serenidad y mejor talante.
Luego, encontraremos limitaciones, sean del orden que sean, que igualmente será necesario ACEPTAR y ASUMIR.
Y así iremos construyendo la verdadera y única realidad de uno mismo, que una vez aceptada y asumida se convertirá en Fuente de la Felicidad deseada.
Pero, ¿qué ocurre?
Sencillamente que la persona no se AMA a sí misma, no acepta su VERDAD, y entonces aparece, primero la rebeldía, más tarde la mentira de pretender vivir otra realidad distinta a la propia, para finalmente, equivocarse en los pasos que se den con otras personas para convivir o en proyectos que no tienen posibilidades reales de éxito.
Así, la persona avanzará como en una cuesta abajo, sin freno y de desgracia en desgracia.
Encontrará en estos caminos señuelos de felicidad, pero serán fallidos porque no tienen base en la persona, al fracasar su propia interioridad y realidad.
Creo que estas notas son suficientes para comenzar un diálogo personal, que aporte LUZ para uno mismo, pero también para poder ayudar a otros.
Si alguien lo necesitará, podríamos seguir profundizando.
La FELICIDAD también podemos procurársela a los demás con la ayuda que necesiten; por ello y para ello, te pido que reces a María, nuestra Madre y nuestra Guía, por las necesidades de los Hermanos, a fin de que sean superadas con la valiosa ayuda de la Gracia que alcanzará tu oración. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI 
Madrid - España 
www.materchristi.es