Reflexión 12 de Enero

Buenos días 
En la Víspera de la Celebración del Bautismo de Jesús, el Evangelio de San Juan, capítulo 3, nos muestra a Jesús bautizando en la región de Judea y a Juan en Enón, cerca de Salín.
En este lugar es donde Juan Bautista dirá algo muy significativo en aquel momento, y muy luminoso para nosotros.
Refiriéndose a Jesús dice: "Es necesario que yo mengüe para que Él crezca" (Jn 3,30).
Juan Bautista tenía plena conciencia de la misión que estaba cumpliendo,  por un lado, y por otra parte, que era el momento de ir dando paso al Mesías, del que era el Precursor.
En nuestras vidas, cuántas veces deberíamos tener muy presente este "dejar paso" a quienes vienen detrás, y han de ir ocupando los lugares, trabajos o responsabilidades que tenemos.
Pero este "ir menguando para que el otro crezca", no es una práctica para cuando llega el momento de la jubilación total, sino que debería ser una actitud siempre presente, pues dejar paso en las diferentes responsabilidades es necesariamente algo gradual y según las circunstancias y necesidades lo vayan reclamando.
Tú creciste en su momento; ¿has sabido menguar en los momentos oportunos?
O todavía, ¿no crees que esto vaya contigo?
Reza al Espíritu Santo para que te ayude a comprender algo tan esencial en la vida de toda persona, y para qué te dé la fortaleza para llevarlo a cabo.
Y ahora, reza como cada día, por todas las intenciones de los Hermanos que necesitamos de tu oración. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI
Madrid - España
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