Reflexión 27 de Agosto

Buenos días.
Cada día termino la meditación pidiendo a cada uno la oración en favor de las necesidades de los otros.
La idea es bien clara y definida que espero sea atendida por cada persona de la que aquí nos encontramos, pero siempre tengo la sospecha de que no se llega a tener totalmente claro lo que supone esta petición.
Por eso hoy voy a intentar explicar mejor la idea e intención de esta petición de cada día.
En primer lugar habrá que recordar aquel consejo evangélico: “Os digo, además, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre que está en los cielos. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos” (Mt 18,19-20).
En segundo lugar que el motivo de rezar es impetrar la Gracia de Dios para todos, incluido para el que reza.
En tercer lugar es darse cuenta de que uno puede acogerse a esa oración de los Hermanos, sin necesidad de tener que decir nada sino dirigirse a Dios para decirle que se acoge a la oración de esta comunidad cristiana que formamos en torno a María, nuestra Madre y nuestra Guía, para alcanzar la gracia o beneficio que necesite.
Y ya en cuarto lugar que es muy importante como necesario que no pasemos por alto esa petición diaria que hago, porque a cada uno bien poco le cuesta hacer una breve oración por esta intención y el beneficio es altamente beneficioso para todos.
Sirva como ejemplo que yo me acojo a vuestra oración comunitaria para que el lunes 29, en el que me han de practicar un cateterismo cardiaco, todo resulte bien en el Amor y Voluntad de Dios Padre.
Con el deseo de que se reactive esta oración diaria y comunitaria que todos los días pido, he de acabar pidiéndote que hoy, día sábado, reces a la Santísima Virgen María, para que interceda en favor de todas las intenciones y necesidades de los Hermanos. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
www.materchristi.es