Reflexión 19 de Mayo

Buenos días.
Comienza hoy la Novena al Espíritu Santo como preparación para la Solemnidad de Pentecostés, esto es, la preparación para poder estar dispuesto cada uno a vivir entrañablemente ese día tan trascendental para la vida de la Iglesia Santa, pues no se puede olvidar que fue este día cuando se realizaron todas las promesas que había hecho el Señor Jesucristo.
El Espíritu Santo habita en todos los bautizados, pero la Celebración de Pentecostés nos da a cada uno la oportunidad de activar el encuentro personal con el Divino Espíritu, para abrirse a su luz, a sus Dones y Frutos, a su acción, que es, en definitiva, la que nos sostiene en el caminar de la jornada terrenal.
Estos días de preparación nos deberíamos emplear en revisar esos Dones y Frutos referidos más arriba, así como el grado de consciencia que tengo de la presencia del Espíritu Santo en mí, la que necesito y la que debo procurar con una sencilla oración cada día por la que le convoque a vivir y actuar en mí.
Hay diferentes oraciones al Espíritu Santo, por ejemplo hoy os dejo esta que es sencilla y que seguro la conocéis la mayoría: “Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles, y enciende en ellos el fuego de tu amor.
Envía Señor tu Espíritu y renueva la faz de la tierra.
Oh Dios, que has iluminado los corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo; haz que guiados por este mismo Espíritu, saboreemos las dulzuras del bien y gocemos siempre de sus divinos consuelos.
Por Jesucristo nuestro Señor. Amén”.
Y ya hoy, reza, por favor, al Señor Jesucristo en su Sacratísimo Corazón, para que derrame sus gracias y bendiciones sobre todos los Hermanos que aquí nos encontramos en su Santísima Madre. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
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