Reflexión 18 de Diciembre

Buenos días 
Entramos en la semana de preparación directa para la Celebración de la Natividad del Señor.
La Liturgia nos lleva de la mano a VIVIR con EXPECTACIÓN, todo el transcurso de los acontecimientos que llevaron a María y a José hasta Belén, para que se cumplieran la palabras del Profeta que anunciaron al Mesías, nacido de la Casa de David.
A nuestro alrededor se va viendo la agitación de los preparativos puramente humanos y materiales.
Pero, ¿quién se acuerda del que es el centro, origen y causa de la Navidad?
Tú y yo debemos tener muy presente al NIÑO DIOS que nos va a nacer, y mientras vamos todos preocupados y ocupados por todos los detalles de fraterna convivencia, debemos recordar constantemente al NIÑO DIOS que esperamos.
Contemplamos con ternura a la Virgen Madre del ADVIENTO, de la ESPERANZA, a la que espera EXPECTANTE el Parto, a Santa María de la O.
Y acompañamos aquellos días llenos de ilusión, que la Virgen y San José recorrieron de Nazaret hasta Belén, sin OLVIDAR rezar hoy también por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI
Madrid - España
www.materchristi.es