Reflexión 18 de Marzo

SANTA MARÍA, Madre y Maestra. 
En este sábado de Cuaresma, volvemos la mirada a la VIRGEN para encontrar en Ella apoyo y fuerzas para continuar esta senda cuaresmal, con una gran confianza en que podremos avanzar por nuestro camino de CONVERSIÓN PERSONAL.
La Santa Iglesia en su Liturgia, mira a la Virgen entre sus variados Títulos, como 'Madre y Maestra'.
Como tal, nos puede tutelar para que sigamos la vida bajo su PATROCINIO y dejándonos ENSEÑAR para aprender muchas cosas, como p. ej. ser fieles discípulos de su Hijo Jesucristo. 
También, sentirnos como verdaderos Cristianos, y tantas y tantas cosas más y necesarias, para poder vivir como auténticos hijos de Dios y de la Iglesia.
Para hacerposible todo esto , hemos de potenciar nuestra relación filial con MARÍA, nuestra Madre y nuestra Guía. 
Hemos de aprender a vivir una verdadera Devoción a la Santísima Virgen, en la que se combine la contemplación de su Vida, para aprender de sus palabras y de sus gestos, y la Oración = Diálogo con Ella, para compartir todas las preocupaciones, para preguntarla, para pedirla, para escucharla..., en fin, para mantener una verdadera relación filio-maternal.
Ella está dispuesta a ejercer contigo como Madre y Maestra, pero tú lo estás para se Hijo y Discípulo?
Si te es posible, que lo será si quieres, dedica hoy un buen rato a tratar con Ella esto que estoy proponiendo, que sea Ella, tu Madre y tu Maestra. 
Madre lo es, porque su Hijo en la Cruz nos la dio como tal, pero si tú no la aceptas como tal, no hay tal Maternidad para ti. Y lo mismo ocurre como Maestra; nadie puede enseñar a quien no acude a que le enseñen, porque no quiere o no le interesa aprender.
ASÍ ES DE SENCILLO. 
A Ella le suplico que abra su Manto y nos cobije a todos sus Hijos de la Casa de la Madre y Guía, y nos alcance del Altísimo las gracias que cada uno necesite. AMÉN.