Reflexión 30 de Agosto

Buenos días.
Penúltimo día del mes de agosto, que nos aboca al comienzo de lo que se denomina nuevo curso.
Este hecho, que es tan natural y conocido por todos, nos pide una preparación en varios sentidos, pues se viene de vivir unos meses de descanso, de relax, de haber roto el ritmo cotidiano, que de alguna forma hay que volver a recuperar y ponerlo en marcha, aunque, sin duda, de una forma más acertada.
Se debe tomar conciencia de que esta nueva etapa o curso, debería ser mejor que el pasado en aquellas cosas que comprendiste que no fueron como debían, bien por errores cometidos, bien porque no se consiguió el grado de virtud deseable o necesaria.
Se debe pensar cómo vivir con más decisión y firmeza lo que es la voluntad de Dios, en el día a día, con la oración muy presente en el horario específico que se siga cada día, el rato que se aparta para dedicárselo al Señor y mantener el espíritu de atención de lo que es ser cristiano, fiel discípulo del Señor Jesucristo.
Trabajemos ya para disponer, psicológica, mental y humanamente, toda nuestra persona y dar la respuesta que se espera de cada uno en el estado y responsabilidad que se tiene.
Y hoy, día miércoles, acojámonos a San José para que nos ayude a ser como el Señor espera de cada uno, mientras que a su Santísima Esposa le encomendamos las necesidades de cada uno de los Hermanos. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
www.materchristi.es