Reflexión 25 de Septiembre

Buenos días 
Puede que alguna vez nos hayamos encontrado con el conflicto personal entre nuestras "fuerzas" y la realidad de la propia voluntad.
Ante un acontecimiento, a veces se reacciona diciendo: "No puedo porque me faltan las fuerzas", expresando de esta manera la incapacidad de hacer frente a la situación planteada.
Pero, esta afirmación, ¿es cierta?
¿No se estará ocultando en ese "faltar las fuerzas", la falta de VOLUNTAD?
Es cierto que los actos de la VOLUNTAD no siempre son fáciles de realizar, y siempre exigen una actitud y predisposición a llevarlos a cabo, cuando lo exigen los valores esenciales de la FE, de la MORAL y de las COSTUMBRES, en la buena convivencia.
Sabemos que la VOLUNTAD completa las Potencias del Alma con la INTELIGENCIA y la MEMORIA, encontrando la dificultad en ejercitar correctamente la VOLUNTAD, precisamente en no fomentar el ejercicio coordinado de las tres Potencias del Alma, asistidas por la RECTA CONCIENCIA, que siempre ofrecerá argumentos y razones suficientes a la INTELIGENCIA, para que ésta ponga en accion el 'Acto de la Voluntad' correspondiente.
Conocerse a sí mismo en las propias actitudes, reacciones y comportamientos es muy importante, y de un gran valor para GOBERNARSE convenientemente, en beneficio propio y el de los demás.
Empleemos un poco de tiempo para reflexionar y ver si hay algo en lo que debemos rectificar, porque siempre merecerá la pena hacerlo.
Volvamos a orar UNIDOS por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guia. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI