Reflexión 24 de Marzo

Buenos días 
Hermanos estamos a las puertas de la SEMANA SANTA.
Mañana, DOMINGO DE RAMOS, veremos al Señor Jesucristo entrar triunfante en JERUSALÉN, donde más tarde se va a ENTREGAR en el mayor ACTO de GENEROSIDAD que quepa imaginar.
Cargando con todos los pecados de todos los hombres, de todos los tiempos, el Señor sufrirá todos los TORMENTOS de la PASIÓN y MORIRÁ bajo el peso de todos los pecados.
Si bien estamos ante la mayor crueldad de la historia, hemos de experimentar la SALVACIÓN y REDENCIÓN que a cada uno nos ha procurado el AMOR INFINITO con el que el Señor subió a la CRUZ.
Este MISTERIO de AMOR y de MISERICORDIA no puede menos que suscitarnos SENTIMIENTOS de un AMOR SIN LIMITES a nuestro Dios.
Al PADRE ETERNO, que nos envió a su Hijo Jesucristo para establecer con todos los hombres la ALIANZA ETERNA.
A su HIJO JESUCRISTO, por su OBEDIENCIA al Padre en favor de la Salvación de cada uno de nosotros.
Al DIVINO ESPÍRITU, que nos dirige y nos sostiene en el seguimiento de las huellas del Maestro.
Continuemos con nuestra mejor disposición, a vivir con toda intensidad la ÚNICA SEMANA SANTA que tenemos ante nosotros, porque las pasadas, ya no tienen valor para nuestras vidas, y la próxima, nadie sabe si llegará para vivirla.
Ante este gran misterio de la vida, VIVAMOS EL PRESENTE con la fuerza que se nos ofrece.
Sin olvidar rezar hoy también por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guia. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI