Reflexión 31 de Diciembre

Buenos días.
Cuando suenen las doce campanadas que marcan el tránsito de un año a otro, lo primero que nos encontraremos será la SOLEMNIDAD DE SANTA MARÍA, MADRE DE DIOS.
Comenzaremos el nuevo año de la mano de María, nuestra Madre y nuestra Guía, lo cual ya es una garantía de confianza y de esperanza cara a los aconteceres del 2020.
Creo que bien merece prepararnos para despedir este año con la Sagrada Familia, abandonando en la Misericordia de Dios todos los errores cometidos y los sinsabores vividos, para encontrarnos con el Nuevo Año una nueva vida, sin olvidar el Sacramento de la Confesión para pedir perdón de aquellos pecados que necesitan de este gran DON que el Señor Jesucristo nos dejó, para vernos liberados de nuestros pecados de pensamiento, palabra, obra y omisión.
A Santa María, Madre de Dios, reza hoy con FE para que sean atendidas todas las necesidades de los Hermanos. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI 
Madrid - España 
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