Reflexión 28 de Diciembre

Buenos días.
No podemos pasar sin detenernos en la Fiesta de este día: Los SANTOS INOCENTES.
El Libro del Génesis nos habla en el cap. 4 de Caín y Abel, y el versículo 10 dice en concreto: "El Señor le replicó (a Caín), ¿Qué has hecho? La sangre de tu hermano me está gritando desde el suelo".
La matanza de Herodes a los niños de Belén de dos años para abajo (Mt 2,16), se ha visto reflejada en la matanza de niños que en la actualidad y desde hace bastantes décadas, se está produciendo a través del ABORTO.
Es una sangre que igualmente clama justicia frente a Dios, acusando a esta Sociedad que ya se muestra como insensible ante tal barbarie.
Sea como sea nuestra situación ante el ABORTO,
hemos de pararnos a reflexionar.
En primer lugar, para tomar conciencia de la magnitud del pecado (crímenes): 100.000 abortos en España al año, 55 millones en el mundo.
Añadir a estos datos iniciales, el número de mujeres gestantes que se siguen entregando al ABORTO, con el que arruinan sus vidas, no solo moralmente, sino también psicológicamente, más otras secuelas.
Asimismo, podremos calcular las personas que intervienen: médicos, personal sanitario, personas que influyen o apoyan a las madres para que aborten, etc.
El resultado de muerte es espeluznante en todos los sentidos, pues la muerte espiritual producida por el horroroso pecado que es el ABORTO, poco lo valoramos y poco se tiene en cuenta.
Un buen examen de conciencia, una profunda conversión del corazón, son mis sugerencias para hoy.
A la Meditación, adjunto una conferencia reciente en la Parroquia de Caná de Madrid, de una enfermera ex abortista, que bien merece escuchar al ser un testimonio de una experiencia de primera mano.
Recemos hoy con mucha confianza en la Misericordia de Dios, por todas las personas afectadas por el aborto, y adquiramos el hábito de rezar con frecuencia por este gran mal que tanto daño está produciendo a la Humanidad.
Tampoco falte la humilde oración que hacemos cada día por todas las necesidades de los Hermanos que nos reunimos en torno a María, nuestra Madre y nuestra Guía. AMÉN.
Emilio Castrillón 
MATER CHRISTI 
Madrid - España 
www.materchristi.es