Reflexión 18 de Agosto

Buenos días Hermanos de la Casa de la Madre y Guia.
Hoy cuando uno abre el corazón ante Dios, un gran silencio de piedad lo invade.
Dolor y compasión, por lo ocurrido, y por las víctimas.
Sabíamos mucho en España de terror y de atentados del pasado, pero..., sigue el corazón llorando ante esta dura e incomprensible realidad.
Poco más se decir.
Oremos a la Madre y Guia por:
Las victimas, muertas y heridas.
Por sus familias.
Por los afectados psicológicamente, porque fueron testigos.
Por la Policía, que tiene que trabajar mås duro en la investigación. 
Por las Autoridades, que han de estar a la altura de la grave situacion.
Y por los terroristas, los que actuaron y los que estén preparados, para que la Misericordia de Dios los paralice en sus maquiavélicos planes.
¡¡¡María, nuestra Madre y nuestra Guia: Ruega por España!!!