Reflexión 17 de Agosto

Buenos días:
Ya de vuelta de mis Ejercicios Espirituales, lo primero que quiero decir es: ¡GRACIAS!
Gracias por vuestra compañía espiritual, y Gloria y Alabanza a Dios por todo lo que en estos días me ha regalado con su Presencia y con su Amor.
Reanudo, pues, mis encuentros diarios con vosotros, Hermanos de la Casa de la Madre y Guia, con un único interés, que juntos caminemos con ILUSIÓN y CONFIANZA por las sendas de la  FE, buscando en TODO la Voluntad de Dios y siguiendo al que nos tiene dicho: "YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA" (Jn 14,6).
Que la MADRE Y GUIA nos sostenga en los quehaceres de cada día.
Y que tampoco hoy falte la oración de cada uno por las necesidades del resto de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guia. AMÉN.