Buenos días, queridos Hermanos de la Casa de la Madre y Guía.
Hoy, Día del Señor, el Evangelio nos da una clave DEFINITORIA y DEFINITIVA, para que podamos comprender bien QUÉ ES SER discípulo de Cristo, o lo que es lo mismo TESTIGO DE CRISTO.
Escucha lo que dice el Señor, lo que TE DICE a ti y a mí el Señor:
"A quien SE DECLARE por mí ante los hombres, yo también ME DECLARARÉ por él ante mi Padre que está en los cielos. Y si uno ME NIEGA ante los hombres, yo también LO NEGARÉ ante mi Padre que está en los cielos" (Mt 10,33).
Estas palabras de Jesús me fueron sugeridas un día al comienzo de mi Vida Apostólica cuando tenía 18-19 años, y fue tal el IMPACTO que me causaron, que nunca más he intentado echarme atrás cuando se ha tratado de dar razón o testimonio de Cristo y de mi Fe.
Os invito a la reflexión, porque el Señor Jesús es extremadamente claro y concreto frente a nuestro destino de eternidad.
Como cada día, os invito a no faltar a la cita de la Oración por el resto de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.
