Reflexión 23 de Agosto

Buenos días.
Hoy comenzamos formalmente los Ejercicios Espirituales online que, durante cuatro días, desde la Sede de Mater Christi de Madrid, dirigirá un servidor.
Los que os unáis a ellos, sabed que uno de los elementos esenciales en cualquiera de los Ejercicios Espirituales en lo que se pueda participar, es el silencio.
Silencio, tanto exterior como interior, para que se pueda estar en la disposición de escuchar al EspírituSanto.
El Libro de las Lamentaciones 3,25-26 nos dice: “El Señor es bueno para quien espera en él, para quien lo busca; es bueno esperar en silencio la salvación del Señor”.
Desde el silencio es como mejor se puede buscar la verdad de todo lo que la persona arrastra en su vida, de todo lo que hay en su corazón y de la Verdad que debe buscar y alcanzar: Jesucristo, el Señor, que ya dijo que Él  era “el Camino, la Verdad y la Vida” (Jn 14,6).
En el Salmo 4,5 recibimos un buen consejo: “Temblad y no pequéis, reflexionad en el silencio de vuestro lecho”.
Con estos pensamientos, busquemos estos días la Gloria de Dios con aquel otro Salmo que nos enseña: “¿Por qué te acongojas, alma mía, por qué gimes dentro de mí? Espera en Dios, que volverás a alabarlo. Salud de mi rostro, Dios mío. (Sal, 41.6).
Que María, nuestra Madre y nuestra Guía, nos acoja y lleve de su mano durante estos días de Ejercicios Espirituales. AMÉN.
Emilio Castrillón Hernández
MATER CHRISTI
Madrid – España
www.materchristi.es