Reflexión 28 de Octubre

Buenos días en el DÍA DEL SEÑOR.
A nadie le gusta cometer errores, porque parece que cuando los errores son conocidos, desmerecen a la persona, pero esto entra dentro de ese ridículo sentido del "qué dirán".
A los errores habría que darles los diferentes valores que tienen.
Ante todo hay que decir que el ERROR, si de entrada lo es, hay que hacer que tenga al menos una cara positiva, porque su aportación a la experiencia de la vida es importante.
Pero el ERROR, también enseña y mucho, cuando se es capaz de reconocerlo y asumirlo.
La EXPERIENCIA DE LA VIDA, que tanto vale para sí mismo, tiene además un gran valor para poder ayudar, orientar y aconsejar a los demás.
Esta dimensión hace que cuando se producen los ERRORES no se huya de ellos, y se aprovechen cuanto se pueda para alcanzar toda la MADUREZ que se espera de una persona adulta.
Cabría perfectamente hacerse una pregunta muy sencilla:
¿Qué hago cuando cometo algún ERROR...?
Esta pregunta tiene muchas variables y dimensiones. Ojalá que no te canses de ESCRUTAR tus actitudes y comportamientos ante los ERRORES.
Recemos ya por todas las necesidades de los Hermanos de la Casa de la Madre y Guía. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI
Madrid - España
www.materchristi.es