Reflexión 7 de Diciembre

Buenos días
Noveno día de la Novena de la Inmaculada.
Llegamos al último día de preparación para Celebrar la SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA.
¡¡¡Siempre hay una última vez para todo!!!
Unas veces, como en esta ocasión, se conoce previamente que va a suceder esa última vez, pero hay otras muchas situaciones, de mayor o menor importancia, que no se CONOCE cuándo ni cómo será esa última vez.
Por ello, las personas debemos ser responsables y vivir teniendo en cuenta esa ÚLTIMA VEZ, para que nunca nos sorprenda en ninguna actitud negativa o sin posibilidad de reacción, al menos con una buena reacción.
Es el ÚLTIMO DIA DE LA NOVENA, en el que deberíamos estar en las mejores condiciones para poder ofrecer mañana a la Virgen Inmaculada, los frutos de estos días recorridos a la sombra de su tan gran privilegio, como es el haber sido concebida sin pecado.
La miramos con nuestros ojos, que expresan la realidad del propio corazón, para contemplar también su último día cuando fue Asunta en Cuerpo y Alma a los Cielos.
Nos precedió junto a su Hijo Resucitado, para poder seguir cumpliendo la MISION que el Señor Jesucristo le confió al pie de la CRUZ. (Jn 19,26-27).
Tanto esta realidad actual, como la propia Celebración de su Concepción Inmaculada, nos ha de llenar de ESPERANZA, y de ILUSIÓN, también para poder continuar nuestra JORNADA TERRENAL en el Servicio Divino, a imitación de MARÍA.
Hoy os INVITO a mirarla ELLA, para rezar con toda nuestra CONFIANZA por las necesidades de los Hermanos que nos reunimos en torno a su maternal cuidado. AMÉN.
Emilio Castrillón
MATER CHRISTI
Madrid - España
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